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miércoles, 19 de abril de 2017

1989 «Like a prayer» alcanza el nº1 de Billboard

«Like a Prayer» (en español, «Como una oración» o «Como una plegaria») es una canción de la artista estadounidense Madonna, extraída de su cuarto álbum de estudio, Like a Prayer. Se lanzó el 3 de marzo de 1989 a través de Sire Records como el primer sencillo del disco. El tema figura en los álbumes de grandes éxitos The Immaculate Collection (1990) y Celebration (2009). Su composición y producción estuvo a cargo de Madonna y Patrick Leonard.

En el aspecto musical, «Like a Prayer» es una canción pop rock relacionada con el
gospel y la música funk. Un coro de acompañamiento aumenta la naturaleza espiritual de la canción y una guitarra de rock le da a la música un sonido oscuro y misterioso. Madonna introdujo textos litúrgicos en la letra, inspirada por su educación católica, pero cambió el contexto en el que se usan, por lo que adquieren un doble sentido sexual y religioso.
 
La canción se publicó asociada a una campaña publicitaria de Pepsi que resultó cancelada en pocos días, debido a la polémica generada en torno al video musical de la canción. Sin embargo esta se convirtió en un hit mundial y es uno de los sencillos más vendidos de la carrera de Madonna. Aparece en el puesto número 17 de las canciones más vendidas de la historia. La revista Rolling Stone calificó a la canción en la posición #300 en el listado de las 500 mejores canciones de todos los tiempos según Rolling Stone.

La canción Like a Prayer dio nombre al álbum lanzado por Madonna en marzo de 1989, y de hecho es la que abre dicho disco. Fue un hit mundial que alcanzó el #1 en las principales listas de éxitos. Tras un año de ausencia en el mundo de la música, la reaparición de Madonna se produjo con esta canción y con el apoyo de una campaña publicitaria de Pepsi. Madonna vio redoblada su presencia en los medios por su reciente divorcio del actor Sean Penn después de más de tres años de matrimonio y por el escándalo que provocó el video musical de Like a Prayer.

A pesar de que el escándalo eclipsó todo lo demás, Madonna había puesto todo su esfuerzo y empeño en su nuevo trabajo discográfico. Fue un álbum que tras la controversia inicial, recibió múltiples elogios de la prensa musical «seria» y que aún hoy, se cuenta entre los mejores del género pop.

La canción comienza con un sonido de guitarra eléctrica. Después, Madonna entona los primeros versos de la canción sobre un tono de órgano de iglesia; tras esto comienza un ritmo lento de baile siluetado por un coro Gospel femenino que se rompe nuevamente por la voz de Madonna. Es una extraña forma de comenzar una canción pop, pero más extraño suena aún la mezcla del coro Gospel con el pop, una de las mejores canciones de Madonna en la que una vez más vuelve a sorprender a todo el mundo. La canción contiene arreglos de guitarra eléctrica extraídos del álbum The Black Album de Prince que nunca llegó a publicarse.

»Like a Prayer» está compuesta y producida por Madonna y Patrick Leonard, y se podría decir que es la canción que mejor define el aspecto artístico del dúo.

A pesar de que la canción contiene una fuerte influencia hacia la religión Católica, Madonna nunca tuvo las intenciones de burlarse de la religión, al contrario, Madonna pretendía mostrar la forma en que el catolicismo influye en su propia vida. Lo cierto es que muchos sectores de la religión se manifestaron contra Madonna acusándola de blasfema, en torno al video clip de la canción.

»Like a Prayer» es una de las canciones que se seleccionaron para formar el primer álbum grandes éxitos de Madonna titulado The Immaculate Collection, también fue utilizada en la banda sonora de la película Jamás Besada protagonizada por una admiradora de Madonna: la actriz Drew Barrymore, además de ser incluída dentro del filme independiente Gummo de Harmony Korine. Se dice que la canción estuvo inspirada en el tema titulado «Underground» compuesta por David Bowie, de la película Labyrinth.

El video musical de «Like a Prayer» fue dirigido por Mary Lambert, que también dirigió los vídeos de «Borderline», «Like a Virgin», «Material Girl» y «La Isla Bonita». El vídeo fue rodado durante tres días en San Pedro, Los Ángeles.

Este video se recuerda por las agitadas y polémicas escenas que lo forman: se pueden ver imágenes del interior de una iglesia, un crimen con Madonna como testigo, el beso de Madonna a un santo negro (queriendo representar posiblemente a San Benito de Palermo), estigmas y cruces ardiendo. Al parecer la idea de Madonna era encontrar la delgada línea que divide el éxtasis sexual del religioso, mezclando ambos temas.

El argumento del vídeo es que el personaje de Madonna sale de su casa y ve cómo dos delincuentes asaltan a un mujer, y un hombre afroamericano va a defenderla. Cuando él llega hasta la mujer, ella ya ha muerto y los asesinos han escapado. Justo en ese momento la policía le sorprende con la mujer en brazos, y se lo lleva detenido. Madonna no sabe si hablar con la policía ya que esto puede acarrearle problemas con los asaltantes ya que el líder de ellos la vio cuando asaltaban a la mujer. Para aclarar sus dudas, llega corriendo a una iglesia. Ora ante la estatua de un santo negro, y de manera milagrosa la estatua cobra vida y acaricia a Madonna. En otra escena de trance místico, un ángel igualmente negro, pero de facciones femeninas, agarra a Madonna de la cintura y la impulsa hacia el cielo. Luego Madonna despierta del presumible sueño o visión, y acude a la comisaría, donde testifica sobre el crimen que ha visto y así permite que liberen al joven detenido injustamente; con quien después ella al parecer se enamora. En las últimas escenas, la cámara deja ver los cortinajes de un escenario y así se desvela que todo el relato es un montaje teatral. Madonna y los demás personajes se reúnen para despedirse del público.

Las reacciones no se hicieron esperar, por un lado la campaña publicitaria de Pepsi fue cancelada para que no se divulgue ninguna similitud con el video, sumado al boicot producido en los colegios católicos que prohibieron la venta de refrescos. La iglesia acusó a Madonna de blasfema y del uso vulgar que hace de la religión para conseguir fama y dinero. Por último y por si fuera poco la Organización Islámica para la Vigilancia de los Medios de Difusión dijo que el vídeo insultaba a Cristo y el castigo merecido por blasfemia era la muerte. El vídeo fue prohibido en algunos países debido a todo este escándalo.

A pesar de todo, la polémica no afecto en nada a Pepsi que terminó el año con grandes ganancias y Madonna cobró los 5 millones de dólares, a pesar de haber roto el contrato inicial con la empresa.

Varios hechos fueron modificados a partir de la idea original del video. Lambert suavizó un poco la escena en la que Madonna y el santo son disparados por la espalda, la decoración de la iglesia es similar a la de los templos americanos influenciados por el protestantismo, el coro Gospel Andrea Crouch que canta en la canción y una de las coristas de Madonna, Niki Harris, prefirieron no aparecer en el video en torno a la polémica y es una de las pocas ocasiones en las que Madonna aparece con su verdadero color de pelo.

Este video se posicionó en puesto #1 de la cuenta de MTV 100 Videos That Broke The Rules en 2005, y para el 25º aniversario de MTV los televidentes votaron el vídeo como Most Groundbreaking Music Video of All Time. Además, el vídeo fue posicionado en el puesto #20 en la sección The 100 Top Music Videos de la revista Rolling Stones y en el puesto #2 de la cuenta 100 Greatest Videos de VH1.

Existe otra versión de este vídeo donde se emplea la versión 12» Dance Remix. VER VÍDEO

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